Si cierro los ojos casi
puedo ver la silueta de tu rostro recortada contra la sangre que corre por las persianas de mis parpados.
Si pienso en ti siento, aunque
no sepa exactamente qué.
Tu aroma, alguna vez odiado, de tanto en tanto llega hasta mis recuerdos y los hace revolotear como mariposas sobre la playa del tiempo.
Tu aroma, alguna vez odiado, de tanto en tanto llega hasta mis recuerdos y los hace revolotear como mariposas sobre la playa del tiempo.
Éstas aunque no estés,
una presencia enclavada en mí día a día.
No lo sabes, y quizá
nunca lo harás, pero eres tú quien desayuna conmigo, quien me acompaña en auto
en esos largos trayectos cantando viejas canciones a dúo de una sola voz, quien
se ducha y enjabona mi piel con tus recuerdos.
Si duermo son tus brazos
fantasmales los que me rodean, es la ausencia de tus manos quien me acaricia en
las noches y eres tú quien cada noche me recuerda que soy mujer para ti…hombre.
Malena Cid
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Por favor, deja algun mensaje,